Una media de 10 estudiantes por mes en lo que va del año en escuelas de San Francisco de Macorís, han resultado intoxicados por pesticidas que se usan en la producción de arroz, pese al acuerdo contemplado que prohíbe rociar estos químicos en días escolares.
En este municipio de la provincia Duarte conocido por su producción arrocera, labor que conlleva la constante aplicación de agroquímicos para la preservación y protección de este y otros cultivos.
Sin embargo, la utilización de estos plaguicidas cerca a los recintos escolares, ha desencadenado un panorama que afecta la salud de los menores, quienes sin falta acuden a sus centros de estudio para recibir su educación.
Robert Frías, presidente de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) de esta demarcación, indicó que en estos cinco meses al menos 50 alumnos se han visto afectados en toda la zona, la cual abarca alrededor de seis centros educativos.
El pasado viernes alrededor de 12 estudiantes del Centro Educativo Angélica García Moya, en la comunidad de Colón, resultaron afectados. Al menos diez de ellos habrían convulsionado, por lo que tuvieron que ser trasladados al Hospital Regional San Vicente de Paúl de aquí.
Casos anteriores indican que esta situación ha sido una constante, a pesar de que se ha reiterado ciertas restricciones a través de un acuerdo firmado por diversas entidades, para evitar este tipo de percances.
El convenio involucra a productores, parceleros, los ministerios de Medio Ambiente, de Agricultura, de Educación, el Banco Agrícola, y la ADP Seccional San Francisco.
“El acuerdo se basa fundamentalmente en que los productores se comprometen a aplicar el producto solo sábado y domingo, porque la Ley 64-00 de Medio Ambiente y Recursos Naturales, así lo contempla”, expresó Frías.
“En las zonas habitadas se debe aplicar el sábado y el domingo. En el acuerdo que nosotros firmamos se estipula eso y también se les da la prórroga a los parceleros de que si hay una plaga, que hay que aplicar el producto de manera inmediata un día de labores, entonces el parcelero comunica a la escuela vía escrito para que no se imparta docencia”, agrega el profesor.
Frías también comentó a este medio que en el mes de febrero, una niña permaneció dos semanas interna en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de la Policlínica El Pino en la Vega, debido a esta problemática, y que ahora resultó nuevamente afectada por intoxicación. Un equipo de los medios realizó un recorrido por al menos cuatro de los centros educativos afectados en ocasiones anteriores, donde pudo constatar que se encuentran en su mayoría rodeadas por fincas.
Centros educativos
Entre las escuelas en las que se han presentado casos relacionados, se encuentran Escuela Salomé Ureña de Henríquez, Liceo Juan Emilio Bosch, Escuela Pedro Mir, Escuela Angélica García Moya y Escuela Gastón Fernando Deligne. Robert Frías explicó que se han realizado estudios para medir el índice de calidad de aire de aulas escolares.