Santo Domingo, RD.–El empresario Antonio Espaillat, propietario de la siniestrada discoteca Jet Set, quedó en calidad de detenido por el desplome del techo en el centro nocturno, que terminó con la vida de 236 personas durante una fiesta del merenguero Rubby Pérez.
Así lo confirmaron a los medios de comunicación una fuente del más alto nivel de la Procuraduría General de la República, luego de que el empresario fuera interrogado por más de 3 horas tras ser citado por las autoridades de la Dirección Nacional de Persecución que dirige el procurador adjunto Wilson Camacho.
Se espera su traslado en las próximas horas a la prisión preventiva del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva.
El interrogatorio se produjo un día después de que un empleado de la discoteca asegurara que le advirtió con anterioridad a Espaillat que no se podía realizar la fiesta del 8 de abril amenizada por el merenguero Rubby Pérez, en la que fallecieron 236 personas y otras 180 resultaron lesionadas.
El Ministerio Público pudo acceder al celular del empleado, para extraer conversaciones que tuvo con Espaillat.
Asimismo, la Oficina Nacional de Evaluación Sísmica y Vulnerabilidad de Infraestructura y Edificaciones (Onesvie) ya entregó el informe preliminar a la Procuraduría con la explicación de las causas que produjeron la caída del techo.
También fueron depositadas en contra de los propietarios al menos 68 acciones legales, incluyendo querellas y denuncias.
Luego de dos meses y cuatro días del colapso de la emblemática discoteca, sobre Espaillat pesan cerca 70 querellas en su contra por el siniestro.
La hermana de Espaillat, Maribel Espaillat, quien también figura como una de las propietarias del Jet Set, también fue arrestada por parte de las autoridades.
Más tardar el sábado, la Fiscalía del Distrito Nacional contempla depositar la solicitud de medida de coerción contra los hermanos Espaillat por el desplome en el Jet Set.
El pasado sábado se cumplieron dos meses de la trágica fiesta celebrada en la antigua discoteca Jet Set, que la madrugada del 8 de abril se convirtió en la peor tragedia civil en la historia dominicana.
El colapso del local dejó 236 muertos, más de 150 heridos, dos personas aún hospitalizadas y una nación entera clamando por justicia.
Producto del colapso, 174 niños quedaron huérfanos, hoy bajo el cuidado del Consejo Nacional para la Niñez y Adolescencia
232 hogares impactados
205 familias reciben asistencia económica del Gobierno
124 familias reciben apoyo psicológico y social
Decenas de sobrevivientes que no han podido superar los aterradores momentos del derrumbe.
Author: CRDMedia
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