“Esta semana prometí cambios para que cumplamos con el trabajo para el que nos eligió el pueblo británico”, explicó el primer ministro del Reino Unido. El jueves pasado renunciaron cuatro funcionarios importantes
El primer ministro británico, Boris Johnson, nombró el sábado a un nuevo jefe de gabinete, mientras reconstruye su equipo principal tras el escándalo del ‘Partygate’, las fiestas celebradas en la sede oficial del Gobierno, el número 10 de Downing Street, en el momento más duro de la pandemia y con las restricciones más estrictas en vigor.
El ministro del gabinete Steve Barclay, ex ministro del Brexit bajo la administración de Theresa May, dirigirá el equipo de Johnson mientras que Guto Harri será el nuevo director de comunicación. Harri, antiguo periodista de la cadena BBC, ya había trabajado como portavoz de Johnson durante su primera etapa como alcalde de Londres.
“Los cambios que estoy anunciando hoy a mi equipo de alto nivel mejorarán la forma en que opera el No 10, fortalecerán el papel de mis colegas del gabinete y de los miembros del parlamento”, dijo Johnson en un comunicado tras una semana en la que han renunciado cuatro altos cargos de Downing Street.
“Esta semana prometí cambios para que cumplamos con el trabajo para el que nos eligió el pueblo británico. Necesitamos seguir con la recuperación de la pandemia, ayudar a cientos de miles de personas a conseguir trabajo y plasmar nuestra ambiciosa agenda para mejorar al país entero”, explicó Johnson.
El premier británico, que en 2019 obtuvo la mayor mayoría conservadora desde Margaret Thatcher en 1987, se ha negado repetidamente a dimitir por las informaciones de que él y algunos de sus colaboradores asistieron a fiestas la sede de gobierno durante los confinamientos del COVID-19.
Esas revelaciones suscitaron dudas sobre el estilo de liderazgo, a menudo caótico, de Johnson y han dado lugar a la mayor amenaza contra él desde que asumió el cargo. Siguen a una serie de otros escándalos.
Johnson ha admitido que es necesario arreglar los problemas en el corazón de Downing Street, que es a la vez su casa y el centro neurálgico del Estado británico.
Queda por ver si la limpieza en el equipo de Johnson será suficiente para superar la crisis, porque su valoración personal se ha desplomado y su partido ha quedado muy por detrás de los laboristas en los sondeos de opinión.
Con información de Reuters y EuropaPress
Author: Redacción
Medio digital de comunicación de República Dominicana
