Editorial
Le Nouvelliste
El país lleva meses cocinándose en su propio jugo. Poco a Poco. Lento pero seguro.
En los últimos días, cada vez queda menos jugo en la olla pero el pequeño fuego sigue ardiendo.
Nou ap kankannen.
El sábado, la embajada estadounidense en Port-au-Prince, para poder seguir operando, recibió combustible entregado por avión.
El lunes supimos que las exportaciones de mango de Haití a EE.UU. se relajarán. UU. Los inspectores del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos ya no pueden trabajar de manera segura en el país.
Embajadas y organismos internacionales están reduciendo sus actividades todos los días, mudándose o simplemente cerrando sus oficinas en Haití.
Esta tarde, es Le Nouvelliste quien anuncia la suspensión hasta nuevo aviso de su versión en papel.
Desde 1898 hasta la actualidad, es la primera vez en la historia del diario que el diario no puede imprimirse por falta de combustible, papel, inseguridad que dificulta su distribución y los desplazamientos de empleados y periodistas.
Todo se confabula para carcomer a las empresas, instituciones, hombres y mujeres de este país.
Todo el mundo se enfrenta a lo peor, la incomodidad, el miedo y la privación.