
Santo Domingo, RD.–El Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (CODUE) consideró como una mala señal que haya zonas del país donde los dominicanos no puedan penetrar como el caso del Hoyo de Friusa en la provincia La Altagracia, y deploró el desbordamiento de la presencia haitiana en cada rincón de la República Dominicana. Dijo que es muy peligroso para el Estado las manifestaciones de desesperación que muestran los dominicanos por la gran presencia de haitianos en el país.
El pastor Feliciano Lacen Custodio, presidente de la entidad, criticó la represión de militares y policías contra dominicanos que protestaban pacíficamente en Friusa, lo que evidenció que las autoridades no supieron manejar la situación, y se le fue de las manos.
Consideró que es responsabilidad de las autoridades identificar a los supuestos grupos que se habrían infiltrados en la manifestación para desvirtuar sus propósitos.
CODUE critica la creciente presencia haitiana y la falta de control estatal en República Dominicana
“Supuestamente el grupo no tenía la autorización para entrar a esa área, cosa que hay que revisarlo a fondo, esa es una señal que no es buena, porque en la República Dominicana no debe haber ningún sector donde no se pueda entrar, dice que el permiso estaba dirigido a otro lugar. Eso da dos cosas, una que faltó el control de las autoridades para manejar esa crisis y número dos o lo que la gente dice que hay sectores que las autoridades no pueden entrar, eso está por verse, autoridades del gobierno aclaren eso”, afirmó Lacen Custodio.
Añadió que “esta marcha del día de ayer da un mensaje, de que las autoridades tienen que trabajar con las leyes que tenemos y ponerlas en práctica porque lo que se está viendo es que hay desbordamiento de haitianos en el país, y la población en sentido general está entrando en un estado de desesperación y eso peligroso para el Estado Dominicano”.
Lacen Custodio calificó como imprudente lanzarles bombas a los dominicanos que protestaban pacíficamente en el Hoyo de Friusa.
Destacó que donde quiera que la gente se mueve se encuentra con muchos haitianos, pero que no se sabe si están legales o ilegales.
“Hay una presencia tan alta que usted no sabe, el Estado dice una cosa y usted ve otra, entonces hay que revisarlo bien, la República Dominicana tiene buenas leyes que se puede trabajar con ellas, lo que pasa es que no se ponen en práctica”, resaltó el líder religioso.