Golden State Warriors lucha en el final de la temporada regular para mantenerse en puestos de Play-In y así poder sostener la ilusión de ser parte de la postemporada de la NBA. Por eso es imperdonable que Draymond Green se haga expulsar en el primer cuarto del partido de anoche frente a Orlando Magic y por eso las lágrimas de impotencia de Stephen Curry tras una nueva irresponsabilidad de su compañero.
Ni siquiera habían pasado cuatro minutos de partido cuando, con 6-6 en el tablero, Green le protestó enojado al árbitro Ray Acosta después de una falta pitada a Curry, hasta que este lo expulsó por una doble falta técnica. Draymond perdió la calma y siguió protestando varios segundos antes de dejar la pista, mientras era evidente la decepción de su compañero.
A pesar de su expulsión, los Warriors, que pelean con los Houston Rockets para retener la décima plaza en el Oeste, la última que da acceso al Play-In consiguieron triunfar en el campo de los Magic. Andrew Wiggins fue el líder anotador con 23 puntos y Curry aportó 17 puntos y diez asistencias.
Draymond Green reincidente: otra vez expulsado por mala conducta
Recientemente, la NBA permitió el retorno de Draymond Green después de una suspensión indefinida que le impusieron hace tres meses. Esta medida se tomó tras una serie de comportamientos agresivos hacia sus rivales, especialmente durante un enfrentamiento con Jusuf Nurkic, el centro de los Phoenix Suns. Green estuvo fuera de las canchas durante 12 partidos como consecuencia de estas acciones.
A pesar de esta oportunidad de redención, el jugador graduado de Michigan State parece no haber cambiado su actitud. Durante su breve regreso, apenas estuvo en la cancha por tres minutos, y su presencia resultó perjudicial para su equipo, que está luchando por asegurar su puesto en los Play-In. Es importante recordar que Green tiene un historial de incidentes violentos, habiendo protagonizado serias agresiones contra jugadores como Rudy Gobert, Domantas Sabonis y Jordan Poole, entre otros.
La otra reacción de Curry, clave para el triunfo y la ilusión de los Warriors
No fue el mejor partido de Stephen Curry el de anoche ante Orlando Magic pero sí apareció sobre el final para encestar los últimos cinco puntos y asegurar el triunfo de Golden State Warriors que le permite sostener la décima posición en la Conferencia Oeste a pesar de la embestida de Houston Rockets.
Esta claro que Curry vivió el partido con mucha intensidad desde el primer cuarto por la expulsión de Draymond Green hasta el último cuando el marcador seguía muy disputado y él apareció en todo su esplendor para cerrarlo.
La tensión es evidente pues para Golden State Warriors sería un verdadero fracaso ni siquiera clasificar al Play-In. Hoy lo está consiguiendo en el último lugar de la Conferencia Oeste pero le lleva apenas un partido a Houston Rockets que llevan una increíble racha positiva de diez victorias consecutivas y amenazan a todos.