Percepción. El líder de la Fuerza del Pueblo busca conquistar base del PLD, mientras Danilo se empeña en evitar la fuga de dirigentes.
Domingo.-Durante más de dos décadas los expresidentes Leonel Fernández y Danilo Medina mantuvieron una rivalidad a lo interno del Partido de la Liberación Dominicana que llevó a esa organización política a descender del poder tras 16 años consecutivos dominando el escenario político-electoral.
A partir de este domingo 7 de marzo, fecha en que se perfila que el expresidente Danilo Medina sea electo presidente del PLD, se inaugura un nuevo episodio en la rivalidad de ambos políticos.
Por un lado, con la posible proclamación que harán los dirigentes peledeístas, Medina asumirá el reto de tratar de retener durante los próximos tres años la mayor cantidad de adeptos a esa organización política para llegar a las elecciones del 2024 siendo el principal partido de oposición.
Pero esta tarea de por sí enfrenta al menos tres dificultades mayúsculas y una de ellas es la intención del expresidente Leonel Fernández y los dirigentes de la Fuerza del Pueblo de reorganizar en ese partido el voto peledeísta.
Para ello Fernández se apresta a arrebatarle al «viejo partido» los miembros de sus bases, comités, ediles, alcaldes, diputados y otros dirigentes de importancia para tratar de fortalecer el apenas 8.9% (365, 212 votos) de preferencia electoral que obtuvieron en los pasados comicios.
Retorno al poder
Todo con la intención de también convertirse en opción de poder para las elecciones venideras.
Las otras dos dificultades que enfrenta el ex presidente Medina será la supervivencia frente a los crecientes sometimientos que realiza el Ministerio Público contra figuras relacionadas a su entorno familiar y exfuncionarios cercanos mientras estuvo al frente del Ejecutivo.
La tercera dificultad es la deteriorada imagen que percibe el partido morado, especialmente por lo ocurrido tras la suspensión por primera vez en la historia de las elecciones municipales del pasado 15 de marzo del 2020, que desató las movilizaciones populares más grandes desde la primera marcha verde de enero del 2017.
Pese a estos inconvenientes, el partido morado se ha asegurado clasificar como la única organización mayoritaria junto al Partido Revolucionario Moderno por obtener el 37.46% (1,536,989) de los votos emitidos en las elecciones del 5 de julio.
Este hecho les asegura disfrutar solo este año de más de RD$400 millones para sus actividades organizativas, si no se varía la posición de la JCE de colocar a la Fuerza del Pueblo entre los minoritarios.
En ese sentido, la principal estrategia implementada por el danilismo para detener la fuga de dirigentes morados ha sido ampliar en 300 nuevas plazas los miembros del Comité Central como forma de comprometer a 955 dirigentes a lo interno de la organización y sumar 10 nuevos miembros al Comité Político para importantizar a ciertos líderes y evitar su salida.
Por lo pronto, el éxito de las dos nuevas misiones de ambos ex gobernantes también dependerá del principal factor externo a sus estrategias: cómo culminará el PRM sus primeros 4 años al frente del Estado.
Liderazgo
— Escogencia
El domingo el PLD se apresta a escoger su nuevo presidente, al secretario general y Comité Político, tras la juramentación de los nuevos miembros del Comité Central. La organización ha sido presidida por principales líderes.
Author: Redacción
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