Por Juan Manuel Morel Pérez
Ciudadanía RD Media
En la actualidad, la reforma policial es un tema de suma importancia en la sociedad. La necesidad de contar con una fuerza policial profesional, ética y eficiente es fundamental para garantizar la seguridad de los ciudadanos y el respeto a los derechos humanos. Siempre se decía que este proceso de trasformación tenía enemigos dentro de la institución, que se organizaban en grupos que operaban en forma de mafias para boicotear tofo intento de transformar la policía porque se beneficiaban económica e internamente del desorden, que transitaba desde recibir comisiones del macuteo hasta vender posiciones entre otras cosas, pero creo que si esos enemigos existen están en aquellas autoridades que aun prohíjan viejas prácticas nocivas contraria a la filosofía de una policía ética y moderna, uno deseos casos de autoridades que fomentan esas prácticas contrarias al proceso de reforma como el caso de la Escuela de Altos Estudios Policiales, la cual tiene la importantísima responsabilidad de formar los oficiales superiores de la policía.
En la escuela de altos estudios policiales, hemos visto cómo las autoridades, aúpan y promueve n prácticas nocivas para la formación de los policías. Una de estas prácticas consiste en que basado en la tesis de que el IPES se promueve a través de sus estudiantes y que al final de la jornada lo que importa es proyectar la calidad, se incita a validar a estudiantes que no tienen los méritos académicos ni calificaciones honestamente alcanzada para aprobar una asignatura, lo cual no solo afecta la calidad de la educación policial, sino que también pone en riesgo la integridad de la sociedad al permitir que individuos no capacitados se conviertan en agentes de la ley.
Además, esa escuela adolece de una clara falta de ética académica al tolerar la deshonestidad académica , además de desarrollar prácticas que podrían calificarse como contrarias al derecho a la buena administración pública, por el hecho de tener botellas, o sea personas que reciben renumeraciones como docentes y no imparten docencia,
Por si fuera poco, aquellos docentes que se niegan a participar en estas prácticas son perseguidos y excluidos del cuerpo profesoral, por no prestarse a esos comportamientos indecorosos, antiéticos y contrario a todo principio académico,. Es evidente que, para poder salvar esta escuela y garantizar una verdadera reforma policial, es imprescindible destituir a las autoridades responsables de fomentar estas prácticas nocivas.
los enemigos de la reforma policial no solo están en las prácticas antiéticas de, sino también en las áreas de formación por lo que la reforma policial solo podrá avanzar si las áreas encargadas de formar a los futuros líderes policiales adoptan un compromiso genuino con la excelencia y la transparencia. En el caso de la escuela de altos estudios policiales, es claro que representa un obstáculo significativo para este objetivo. Por lo tanto, requiere una reingeniería y contar con personas con una visión acorde a las aspiraciones e intereses nacionales de una policía transparente, reformada como se han propuesto los tomadores de decisión por lo que la destitución de sus autoridades encabezadas por su actual director, subdirectora y coordinadora académica se presenta como una medida indispensable para superar esos vicios que e el fondo son los verdaderos los enemigos internos de la reforma y asegurar una reforma policial sea una realidad tangible y efectiva en nuestra sociedad.
Concluyo como un quijote batallando contra molinos de vientos en este combate por la institucionalidad, haciendo un llamado a los responsable de la transformación eucatca de la policía entre ellos los maestros Carlos Manuel Estrella y Mu-Kien Sang Ben, de no darse el lujo de permitir que una rectoría con tanta luces como la del Coronel Cecilio Franknildo Delgado Agramonte, un joven oficial con talento y dignidad comprometido con la reforma y que tato tiene para aportar a la transformación policial, que tantas luces tiene, se le presenten sombras como la de la escuela de Altos estudios policiales.