Washington (EFE).- La vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, agradeció este domingo el apoyo del presidente Joe Biden para que sea su sustituta en la carrera a la Casa Blanca y afirmó que espera poder ser la elegida candidata del partido para enfrentarse a Donald Trump en noviembre.
“Me siento honrada de contar con el respaldo del Presidente y mi intención es ganar esta nominación”, afirmó en una carta que publicó una hora después de que Biden anunciara que se retira de la carrera y pidiera el apoyo para Harris.
La vicepresidenta afirmó que hará todo lo que esté a su alcance “para unir al Partido Demócrata” y a la nación para “derrotar a Donald Trump”. “Tenemos 107 días hasta el día de las elecciones. Juntos lucharemos. Y juntos ganaremos”, apuntó.
Joe Biden ratifica su apoyo a Kamala Harris
Unos minutos después de anunciar que se retiraba de la carrera a la Presidencia tras semanas de presiones internas, Biden expresó el respaldo para Harris a través de un mensaje en redes sociales.
“Hoy quiero ofrecer todo mi apoyo y respaldo para que Kamala sea la candidata de nuestro partido este año. Demócratas: es hora de unirse y vencer a Trump. Hagámoslo”, apuntó el mandatario.
En una carta a la Nación, Biden explicó que si bien su intención ha sido buscar la reelección, “lo mejor” para el partido y el país es que se retire y se concentre únicamente en cumplir sus deberes como presidente durante el resto de su mandato.
Harris opinió que con este acto “desinteresado y patriótico”, el presidente Biden “está haciendo lo que ha hecho durante toda su vida de servicio: poner al pueblo estadounidense y a nuestro país por encima de todo”.
“En nombre del pueblo estadounidense, agradezco a Joe Biden por su extraordinario liderazgo como presidente de Estados Unidos y por sus décadas de servicio a nuestro país. Su notable legado de logros no tiene paralelo en la historia moderna de Estados Unidos y supera el legado de muchos presidentes que han cumplido dos mandatos”, afirmó.
El Partido Demócrata debe elegir
Harris recordó que conoció a Biden a través de su hijo Beau (fallecido por un tumor cerebral) porque trabajaron juntos como fiscales y que él tenía “los mismos valores que su padre, su honestidad e integridad, su gran corazón y compromiso con su fe y su familia. Y su amor por nuestro país y el pueblo estadounidense”.
El Comité Nacional Demócrata afirmó este domingo que si bien la renuncia de un candidato a la Presidencia a falta de poco más de tres meses para las elecciones “no tiene precedentes”, en los próximos días el partido emprenderá un proceso “transparente y ordenado” para reemplazar a Biden.
“El trabajo que debemos realizar ahora, si bien no tiene precedentes, es claro. En los próximos días, el Partido emprenderá un proceso transparente y ordenado para avanzar como un Partido Demócrata unido con un candidato que pueda derrotar a Donald Trump en noviembre”, apuntó en un comunicado el presidente del Comité Nacional Demócrata, Jaime Harrison.
El Partido Demócrata debe elegir a un candidato en su convención nacional, que arrancará el 19 de agosto en Chicago.
Posibles candidatos para el número dos de Kamala Harris
Harris necesita llegar a la Convención Nacional Demócrata, que comienza el 19 de agosto, con un candidato a vicepresidente.
Los nombres que suenan con mayor fuerza en los medios estadounidense son hombres blancos, que en su mayoría tienen un perfil sólido en estados considerados clave para ganar los comicios de noviembre.
Mark Kelly, senador por Arizona
El senador y astronauta de 60 años tiene un perfil muy popular y podría contribuir a recabar votos en el estado de Arizona, que los demócratas ganaron en 2020 por primera vez en el siglo XXI. Su nombre es el que más se oye en los pasillos del Senado.
Kelly ha sido de los primeros en dar su apoyo explícito a la candidatura presidencial de Harris, que es la única que ya tiene una operación de campaña preparada y lista para enfrentarse a Trump de manera tan urgente como requiere este caso.
Según fuentes consultadas por CNN, Harris y Kelly mantienen una muy buena relación personal y los equipos de ambos han mantenido comunicación frecuente.
Josh Shapiro, gobernador de Pensilvania
El gobernador de Pensilvania, de 51 años, sería una buena opción por su popularidad y su origen, ya que es el gobernador de uno de los estados clave del conocido como “muro azul”, que los demócratas necesitan desesperadamente para ganar la Casa Blanca.
Shapiro, visto como un moderado con ambiciones presidenciales, también ha dado su apoyo este domingo a la candidatura de Harris, lo que deja abierto el camino para que sea compañero de fórmula.
Como fiscal general de Pensilvania, Shapiro ganó su popularidad haciendo frente a los intentos del ‘trumpismo’ de alterar el resultado de las elecciones de 2020 y dos años después se lanzó a gobernador obteniendo una holgada victoria.
Roy Cooper, gobernador de Carolina del Norte
Cooper, de 67 años, ha sido capaz de ganar la Gobernación en 2016 y 2020 en un estado que ha votado mayoritariamente republicano en los últimos dos ciclos electorales, por lo que podría reforzar las esperanzas demócratas de darle la vuelta a esa plaza en noviembre.
Además, Cooper está a punto de dejar el cargo ya que no puede optar a la reelección debido a los límites establecidos en el estado, y su entrada en la contienda electoral no crearía mayores problemas para los demócratas en Carolina del Norte.
Cooper también tiene un perfil en el que destaca su capacidad de trabajar con un legislativo dominado por los republicanos y conseguir acuerdos que le han permitido gobernar de manera efectiva.
Andy Beshear, gobernador de Kentucky
Beshear, de 46 años, es un demócrata a las riendas de uno de los estados más conservadores de país. El año pasado obtuvo la reelección en el estado y se convirtió en una de las estrellas jóvenes en alza del Partido Demócrata.
No obstante, el gobernador ganó en 2019 y 2023 con márgenes pequeños y el hecho de que Kentucky sea un estado fuertemente republicano en las contiendas presidenciales, hace más improbable que consiga arrastrar los votos electorales de ese estado el 5 de noviembre.
Beshear es miembro de una saga política, ya que su padre, Steve Beshear, también fue gobernador de Kentucky entre 2007 y 2015. Su llegada al “tiquete” electoral daría juventud a la hipotética candidatura frente a un Donald Trump que tiene 78 años.