La Feria del Libro de Madrid ha dado un paso significativo hacia la sostenibilidad en su edición de 2025 al incorporar paneles solares como fuente de energía. En un evento tradicionalmente ligado a la cultura y el comercio editorial, esta transformación busca conjugar literatura y conciencia ecológica. La propuesta ha generado atención tanto por su impacto medioambiental como por el simbolismo de unir conocimiento y energía renovable.
Un parque literario que ahora también produce energía
La icónica Feria del Libro de Madrid, celebrada en el Parque de El Retiro, ha integrado un innovador sistema de paneles solares que la convierte en un evento no solo cultural sino también autosuficiente. Este avance responde a la necesidad creciente de reducir el impacto ecológico de grandes concentraciones urbanas, especialmente en eventos multitudinarios. La instalación consta de 176 paneles solares situados estratégicamente en la zona central del recinto, sobre una cubierta diseñada para optimizar la captación solar. Detrás de esta transformación está una colaboración entre:
La organización de la feria.
El Ayuntamiento de Madrid.
Repsol, una de las principales comercializadoras energéticas de España.
La inversión no solo ha servido como símbolo como compromiso con el medio ambiente, sino que también ha supuesto un ahorro en el consumo energético. Según datos proporcionados por los organizadores, en los primeros días del evento, los paneles generaron energía limpia suficiente como para cubrir gran parte del consumo eléctrico de las casetas y espacios comunes, evitando así riesgos como un posible corte de luz durante la feria.
Lectores, autores y energía limpia: un encuentro que transforma
Este nuevo enfoque ha cambiado no solo la logística del evento, sino también la percepción del público, que encuentra en esta edición una experiencia diferente. Lectores, autores y editores han valorado positivamente esta apuesta por la sostenibilidad, destacando la coherencia entre el contenido cultural y el mensaje medioambiental.
Además, la ubicación de la Feria del Libro permite aprovechar al máximo la radiación solar durante las horas punta del evento, mientras se garantiza la seguridad y el respeto por el entorno. La estructura genera sombra y mejora el confort térmico de quienes recorren la feria en las horas más calurosas.
Más allá de los libros: una feria que enseña sostenibilidad
El impacto educativo de esta iniciativa ha sido otro de los grandes logros de la Feria del Libro de Madrid 2025. La instalación solar no solo sirve para alimentar energéticamente el evento, sino que también actúa como herramienta didáctica.
Desde el punto de vista organizativo, esta edición ha implicado una logística compleja, pero enriquecedora. Este esfuerzo se tradujo en un montaje limpio, silencioso y respetuoso con el entorno, demostrando que es posible realizar eventos de gran escala con criterios sostenibles sin perder calidad ni atractivo.
De hecho, se estima que en esta edición se utilizarán 2.000 litros de combustible para operar el único generador necesario, lo que permitirá evitar la emisión de más de 5,5 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera. De este modo, la feria se posiciona así como un modelo replicable para otros eventos culturales que buscan reducir su huella de carbono.
En definitiva, la Feria del Libro de Madrid ha pasado de ser un evento cultural a convertirse en un ejemplo de innovación ecológica. Su apuesta por las energías renovables refuerza la importancia de que la cultura no solo comunique, sino también actúe. Esta edición deja una lección clara: leer puede iluminar la mente, pero también puede ayudar a iluminar el mundo de forma más limpia y asequible.
Fuente: papernest.es