
San Salvador, El Slavador. — Un día después de ser deportado desde Estados Unidos, el periodista salvadoreño Mario Guevara expresó su intención de reconstruir su vida en su país natal y continuar con su proyecto informativo Noticias MG, que distribuye contenido a través de su sitio web y redes sociales.
En entrevista con el programa Mirador Mundial de CNN en Español, Guevara relató que llegó a El Salvador “con los ánimos bajos” y “humillado”, tras dejar atrás a su familia y la mayoría de sus pertenencias en EE.UU., donde vivió durante 22 años y se destacó por su cobertura de redadas migratorias y protestas sociales.
Guevara fue detenido en junio mientras cubría una manifestación contra el presidente Donald Trump en Atlanta, Georgia. Las autoridades lo acusaron de transitar indebidamente en una vía peatonal, obstruir a agentes del orden y participar en una reunión ilegal. Aunque los cargos fueron desestimados en julio, permaneció bajo custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Según Guevara y sus abogados, contaba con permiso para residir y trabajar en EE.UU., pero la Junta de Apelaciones de Inmigración ordenó su deportación basándose en una solicitud de estatus legal rechazada en 2012. A pesar de los esfuerzos legales para frenar la medida, una corte federal de apelaciones rechazó su petición de emergencia esta semana, y el viernes fue trasladado en un vuelo desde Louisiana hacia El Salvador.
“No pudimos ganarle a Goliat, lastimosamente”, declaró Guevara, quien considera que su deportación fue una represalia por su labor periodística.
Durante la entrevista, el periodista reflexionó sobre el giro inesperado de su vida:
“Jamás me imaginé que iba a terminar en mi país deportado. Las mismas historias que yo había cubierto durante años, hoy me tocó vivirlas en carne propia”.
La Casa Blanca defendió la deportación, alegando que Guevara fue detenido por obstrucción legal y que tenía una orden de deportación vigente desde 2012. Guevara rechazó esa versión y calificó los argumentos como falsos.
A pesar del duro golpe, el periodista se mostró esperanzado:
“Las autoridades de El Salvador me hicieron sentir como en casa. Eso me da la posibilidad de comenzar de cero, hacer mejor las cosas y no repetir errores del pasado”.
Organizaciones de derechos humanos han señalado el caso de Guevara como emblemático de la política migratoria actual, y destacan su trayectoria como defensor de los derechos de los migrantes en Estados Unidos.