Precariedad. Los dos destacamentos que cubren esta zona no cuentan con las condiciones básicas de infraestructura para mantener la seguridad de la ciudadanía.
Pastor Bella Vista, La Yagüita de Pastor y las zonas aledañas, ubicadas en la zona suroeste de Santiago de los Caballeros, se han visto inundadas por balaceras y muertos en los últimos meses.
Según una fuente los enfrentamientos e intercambios de disparos por sustancias narcóticas y armas de fuego ilegales, es el diario vivir de sus habitantes.
“Esto se ha hecho siempre aquí, en tiempo atrás hubo una matanza que recogieron más de 300 casquillos. Esto es una bomba de tiempo, tu estas aquí ahora mismo sentado y no sabes cuando tengas que salir corriendo, porque se puede armar un bobo aquí” explicaba.
La precariedad, tanto de mobiliario como de agentes, en la que encuentran los únicos dos destacamentos que cubren toda la zona de Bella Vista, dificulta mantener la seguridad del lugar que contaba al 2010, con una población de aproximadamente 35 mil habitantes, de acuerdo al Censo Nacional de Población.
El cuartel de Pastor, un destacamento pequeño, cuenta con 22 miembros que se dividen en 3 turnos de 6 agentes, que solo poseen un vehículo y una motocicleta para asistir y patrullar los kilométricos sectores bajo su cuidado.
Este es el mismo sistema que existe en el cuartel de la Yagüita de Pastor, solo que allí hay 3 agentes más.
El personal no es suficiente, muchas veces hay vehículos parados porque no hay quien los conduzca, según la fuente, al referirse a la dificultad de la policía de resguardar toda la zona con los escasos recursos que posee esta.
Sin contar las tragedias que desde hace años vienen bañando de sangre estos poblados, en los últimos seis meses se han registrado 9 muertos en balaceras vinculadas a enfrentamientos por drogas y compra de armas de fuego ilegítimas.
Los más recientes hace solo 2 días, identificados como Andy Núñez alias El Gringo y Francisco Antonio Cuevas conocido como el Pocho, en un intercambio de disparos en medio de una compraventa ilegal de dos armas de fuego.
El 15 de octubre, fue ultimado frente a su hijo, Freddy Batista, en Salaya, Las Charcas, en horas de la tarde. Sin embargo, 15 días antes, el 30 de septiembre, Wellington Faña Rodríguez fue muerto por impactos de bala en Maizal, de La Yagüita de Pastor.
Anterior a estos casos, el 11 de agosto, le dispararon mortalmente a Dioris Va´zquez Marti´nez, justamente cuando llegaba a su casa luego de salir de prisión.
En julio 26 de este año, también en una balacera, Edison Marizan Lora perdió la vida.
Para junio, se registraron 3 defunciones , José Miguel Luna, apodado “El Piru”, de 22 años; y Edison de Jesús Núñez Rodríguez, alias “Punpe”, de 28; quienes se enfrentaron a balazos en el interior del Club de Villar Rafa, el día 12 de ese mes, y el 29, Luis Manuel Mayol, quien fue muerto a palos.
En la mayoría de los casos impera la impunidad, ya que los comunitarios no desean presentar denuncias por temor a que tomen represalias en su contra.