Al tragar una espina la sensación de incomodidad suele ser inmediata. -Fuente externa
Durante Semana Santa aumenta el consumo de pescados, por lo tanto, es más probable la posibilidad de tragarse una espina.
En ocasiones, por más precaución que se tenga al comer pescado, de una manera u otra, se va una espina y es cuando ante la incomodidad de esa sensación de algo extraño en tu garganta, entras en pánico y no sabes qué hacer.
Por esta razón,aquí te brindamos algunas de las alternativas más recomendadas que puedes hacer ante esta eventualidad.
Sin embargo, siempre se recomienda ir a un centro médico para verificar si la espina sigue atorada luego de varios minutos, ubicar dónde está y extraerla de ser necesario. Además, para determinar si ha causado alguna lesión y evitar que se infecte.
¿Qué puede hacer al tragar una espina?
Toser
La tos es un mecanismo de defensa natural del organismo que te puede ayudar a expulsar cuerpos extraños en las vías respiratorias y el esófago. En este caso, la tos surgirá como un primer instinto y debe hacerlo con mayor fuerza de la habitual para poder desatorar la espina.
Sin embargo, si al hacerlo sangra o siente dolor, deténgase y acuda al médico.
Tomar cucharadas de aceite de oliva
Unas 2 cucharadas de aceite de oliva funcionarán como lubricante provocando que la espina se deslice y facilitando su expulsión a través de la tos.
Beber agua
Al ingerir agua se ejercerá una presión leve sobre la espina haciendo que se desatore.
Comer alimentos blandos y viscosos
Comer alimentos blandos y viscosos, como bombones o guineos maduros, ayudará a envolver la espina y moverla.
¡No hagas esto!
Comer alimentos sólidos y duros puede provocar que la espina se clave más y complicar la situación
Maniobra de Heimlich, las palmadas en la espalda o pecho puede lastimar la mucosa.
¿Cuándo se requiere atención médica inmediata?
A pesar de no ser un caso mortal, si presenta alguno de estos síntomas debe acudir lo antes posible a un centro médico para evitar mayores complicaciones:
- Dificultad para respirar.
- Dolor en el pecho o en el cuello.
- Tos o vómitos con sangre.
- Imposibilidad para ingerir líquidos o alimentos.
- Inflamación en la zona