
Duverger. RD- Munícipes de Duvergé se manifestaron este viernes frente a las oficinas de la Empresa Distribuidora de Electricidad del Sur (Edesur) de esa zona, en reclamo por una aparente inestabilidad en los servicios eléctricos que ofrece esa empresa.
Los habitantes de ese municipio exigieron una solución urgente a las constantes interrupciones del servicio de electricidad que habrían sufrido sin aparente respuesta.
“El comercio organizado forma parte de la protesta pacífica a las oficinas de Edesur, con el único objetivo de que la Distribuidora solucione la inestabilidad en el servicio eléctrico a esta población fronteriza”, comentaron desde los manifestantes.
Con pancartas en mano y rostros cansados por la impotencia acumulada, hombres, mujeres y jóvenes expresaron su malestar por la falta de respuesta de la Empresa Distribuidora de Electricidad del Sur.
Sumado a esto, señalaron que la deficiencia con la cual se maneja Edesur provoca pérdidas económicas cuantiosas al sector comercio, interrupciones escolares y hasta afectaciones en servicios de salud.
“Estamos cansados de vivir en la oscuridad. Tenemos niños que no pueden hacer tareas, negocios que pierden productos y familias que no pueden dormir por el calor. ¿Hasta cuándo?”, dijo Ana María Bello Vólquez, una de las manifestantes contra los cortes en el suministro eléctrico.
A su vez, señalaron los manifestantes que esta protesta, aunque cívica y pacífica, debe enviar un “mensaje claro” a los responsables de esta entidad: “la provincia Independencia, en especial Duvergé, exige el derecho básico a un servicio energético digno y estable”.
Afirman que los apagones prolongados que aplica Edesur se han convertido en una “pesadilla” que impacta todos los sectores: comercio, educación, salud y seguridad ciudadana.
Según indican el Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras (CUED), asegura que no existen atrasos en los pagos a contratistas y que el flujo de trabajo se ha regularizado, sin embargo, para los habitantes de esta provincia fronteriza, las promesas no iluminan las calles ni refrigeran los hogares.