¡Y el consenso, al carajo!

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Redacción
CRDmedia

La elección de los jueces del Consejo Nacional de la Magistratura ha dejado un sabor amargo en distintos sectores de la sociedad dominicana, ya que se esperaba que la elección de los mismos estuviera más equilibrada en cuanto a aspectos y temas que gravitan en estos momentos sobre nuestra sociedad, por mencionar uno, como es el caso de la invasión pacífica que estamos sufriendo de nuestro vecino país Haití.

Los jueces electos para conformar la Suprema Corte de Justicia, aunque en lo profesional no tienen ninguna objeción por parte de la sociedad dominicana, no obstante, a la gran mayoría de ellos se les sindicaliza en sectores pro haitianos; principales promotores de la agenda que busca ofrecerle las facilidades jurídicas a los haitianos para que de forma permanente se establezcan en este lado de la isla.

Por más que se cuestionó y advirtió al excelentísimo señor presidente constitucional de la República Dominicana, Luis Abinader Corona, de que estableciera un equilibrio en dicha alta cámara, el mandatario hizo caso omiso y procedió a designar a los magistrados sin tomar en cuenta la opinión de otros sectores políticos y sociales que buscan preservar los intereses patrios por encima de lo político.

Acciones como estas ponen en vilo el espíritu democrático que había primado en la elección de las altas cortes lo cual nos deja sin equilibrio de poder en las mismas, ya que todos obedecen a la misma agenda, Unificar ambos territorios.

Estamos ante la nueva política, donde prima el poder por el poder, ¡y el consenso, al carajo!

¡Dios salve nuestra democracia!

Redacción
Author: Redacción

Medio digital de comunicación de República Dominicana

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