
Nueva York (EFE).- La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, anunció este jueves una recompensa de 50 millones de dólares por información que conduzca al arresto del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
Estados Unidos acusó a Nicolás Maduro en 2020, durante la primera presidencia de Donald Trump, por delitos de narcotráfico y terrorismo y en enero de 2025, la actual Administración aumentó la recompensa por su captura a 25 millones de dólares.
Bondi compartió en sus redes sociales un video en el que dice que esta recompensa es «histórica» y calificó a Maduro como uno de los mayores narcotraficantes del mundo y una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos.
«Maduro utiliza organizaciones terroristas extranjeras como Sinaloa y el Cartel de los Soles para introducir drogas letales y violencia en nuestro país», indicó.
Maduro vinculado a grupos terroristas
Además, la fiscal estadounidense anunció que hasta la fecha, «la Administración de Control de Drogas (DEA) ha incautado 30 toneladas de cocaína vinculadas a Maduro y sus socios», con casi siete toneladas vinculadas al mandatario venezolano, «lo que representa una fuente principal de ingresos para los carteles con sede en Venezuela y México».
Bondi también reveló que el Departamento de Justicia de Estados Unidos ha incautado más de 700 millones de dólares en activos vinculados a Maduro, así como dos aviones privados y nueve vehículos.
«Maduro no escapará de la justicia y rendirá cuentas por sus atroces crímenes», dijo en su mensaje la fiscal general.
El Gobierno venezolano repudia la recompensa
Por su parte, el Gobierno de Venezuela repudió la recompensa ofrecida por Estados Unidos a cambio de información que conduzca al arresto del presidente venezolano, Nicolás Maduro.
En un mensaje publicado en Telegram, el canciller venezolano, Yván Gil, expresó que la «patética» recompensa se trata de una «burda operación de propaganda política» y de «la cortina de humo más ridícula» que han visto.

«Mientras nosotros desmontamos las tramas terroristas que se orquestan desde su país, esta señora sale con un circo mediático para complacer a la ultraderecha derrotada de Venezuela», expresó Gil.
Así mismo, el ministro de Exteriores chavista describió el anuncio de la fiscal como un «show» y «un chiste», así como «una desesperada distracción de sus propias miserias», y agregó que la dignidad de la patria venezolana «no está en venta».