
Es peligroso cuando a un gobierno o partido se le pega un mote o un estigma, donde la mayoría considera que a eso se debe x, y o z comportamiento.
En el día de hoy el Dr. Guido Gómez Mazara ha colocado un término en el ideario público que encaja bien con el criterio del gobierno, que a decir verdad en nada le ayudará a buscar el voto en los sectores populares del electorado: los pobres.
Ese criterio es el de POPICRACIA*.
Históricamente en los partidos ha existido una lucha de clases. Unos burócratas que se creen predestinados para dirigir, sobre la gleba que no merece ni elegir a quien la va a dirigir, según sus criterios.
Eso es lo que sucede hoy, el gobierno está compuesto en gran parte por representantes del perfume social, que dista mucho de los que trabajaron para construir el edificio de la victoria del PRM.
El PRM, antiguo PRD, siempre ha contado con el apoyo de los sectores populares, quienes veían en Peña Gómez un digno representante. Ahora los rostros blancos y bien perfumados no evidencian esa conexión que dio la victoria.
Esa POPICRACIA es la que ha impedido la votación masiva y universal de la militancia del PRM, dejando sin armas a los de abajo que en el sufragio tendrían la oportunidad de pasar balance a los arrogantes, desatentos y altaneros funcionarios que han olvidado por quien fue que llegaron al poder.