El enorme y peligroso flujo de armas, municiones, equipos de comunicación y mercenarios hacia Haití es parte de una conjura criminal que procura imponer con una intervención internacional “la solución dominicana a los problemas de Haití”, denunció este viernes Pelegrín Castillo.
El vicepresidente de la Fuerza Nacional Progresista (FNP) señaló como responsables de esa «sofisticada» trama a sectores de Estados Unidos como la diáspora haitiana, los afroamericanos y facciones radicales del Partido Demócrata.
“Proyectan agudizar al extremo la violencia de las llamadas bandas o gangas, para que el éxodo hacia República Dominicana se escale aún más y se consolide como ocupación”, dijo.
Agregó que “se proyecta hacer crecer cerca de 400 asentamientos haitianos existentes, los que están destruyendo la cohesión territorial y social de la República, algo que las autoridades dominicanas conocen”.
Dijo que las bandas criminales en Haití emplean técnicas de terrorismo similares a las usadas por ISIS y Boko Haran, como violaciones en masas de mujeres y niñas, en un contexto de guerra civil no declarada, como recientemente expresara el rector de la Universidad Quisqueya en Haití.
“HAITIANOS EN RD, DOMINICANOS FUERA”
Esos mismos sectores –añadió- están enviando recursos millonarios crecientes hacia los haitianos en República Dominicana “para que adquieran numerosas propiedades urbanas y rurales, así como negocios de diferentes tipos y pasen a controlar áreas específicas de sectores terciarios”.
Al propio tiempo, continuó, las naciones poderosas llamadas “amigos de Haití” y los organismos internacionales estimulan la salida de los dominicanos con calificación laboral.
“En un impúdico ejercicio de intercambio de poblaciones: haitianos en República Dominicana, dominicanos fuera “, dijo.
LLAMADO A LA UNIDAD NACIONAL
El también presidente del Foro Permanente de Partidos Políticos de la República Dominicana (Foppredom) reiteró el llamado al pueblo dominicano a apoyar los reclamos del Manifiesto del 6 de Agosto de la Marcha Patriótica convocada por el Instituto Duartiano, para unirse más allá de los partidos y las diferencias ideológicas.
“Porque esos procesos están poniendo en cuestionamiento la existencia de la nación y sus instituciones, y sin unidad nacional sin precedentes, no será posible superar esas pruebas y derrotar esas amenazas”.