Por: Juan Manuel Morel Pérez
Ciudadanía RD Media

Antes de entrar en materia y nadar en rio revuelto allí donde anidan las pirañas, es necesario saber que la tasa de homicidios es la “Proporción numérica, concretada por lo común en un tanto por cien mil habitantes, para determinar la cantidad de homicidios dentro de la población total y medir la criminalidad, se toman loas muertos porque es el único hecho que no se puede ocultar.
Claro está que estas estadísticas sólo operan sobre los datos registrados. Los indicadores de la tasa de homicidios son:
1. Homicidios: Lesiones intencionales ocasionadas por una persona a otra que causan la muerte. (Excluye las muertes por lesiones de tránsito y otras lesiones no intencionales,
2. Homicidios relacionados con la convivencia,
3- Homicidios relacionados con la delincuencia entre este renglón se encuentra de acuerdo al Manual Operativo del Observatorio de Seguridad Ciudadana el Enfrentamiento con organismo de seguridad;
4- Muertes en eventos de tránsito.
Hago este preámbulo ya que el pasado miércoles 26 de abril fui testigo a través de un short colocado en redes sociales que el excelso, conspicuo Daniel Pou, director Centro de Análisis de Datos para la seguridad “Ciudadana” (Cadseci), del ministerio de interior y policía, ósea la persona responsable de producir los datos estadísticos sobre la criminalidad que dentro de nuestro estado constitucional, deben llegar donde el Presidente de la Republica, -oigan bien: el ente que si habla verdad o mentira,
Hace que al Presidente y el gobierno dominicano le lleguen datos verdaderos o falsos sobre seguridad pública-se despacha con que la tasa de homicidios en el país es de 13.1 y que a esta no se le incluye las muertes por intercambios de disparos con la policía, porque según su arte de acomodamiento y “maquillar” la estadísticas, caen en el renglón de muerte en acción oficial y no se consideran muertes violentas, porque en quizás su imaginario o salida rápida a una pregunta, reclasificó los indicadores estandarizados por organismos internacionales , aquí me quiero detener y hacer un aporte a la comunidad de seguridad y defensa con atención a los tomadores de decisión, porque ya esta bueno que le permitamos mentiras a este caballero que se auto valida como experto en seguridad y dice ser politólogo con master en la universidad complutense de Madrid y es que las muertes provocadas por la autoridad de hacer cumplir la ley en enfrentamiento a la criminalidad o como dijo Pou en “acción oficial”, están validadas dentro de esos hechos violentos, por un sin número de situaciones entre ellas que es enfrentamientos con delincuentes y segundo que no se pueden de entrada validar la certeza de que fue un intercambio real, es por eso que esa tasa del 13.1 es falsa pues como dice un viejo aforismo jurídico confesión de parte relevo de pruebas, porque se excluye de esa estadística los muertos en acción legal por la policía, ósea que su tasa de criminalidad se puede disparar hasta a un 15% , que es un indicador elevadísimo para la población como la nuestra.
Al escuchar ese análisis, tasa de homicidio y declaraciones me recuerdo de una canción de obligada colocación en las navidades dominicanas del conjunto Quisqueya donde llaman mentiroso a un señor de nombre Tavin y esto por un conjunto de animales que posee entre ellos una cabra orgullosa que saluda al estilo militar a todo el que pasa y que también fuma. Una gallina flaca que pone huevos de guinea y escribe en maquinilla, una perra alemana que sabe tocar trompeta, y en su gallinero; un gallo que canta bolero a capela y sin ensayo.
Finalmente reafirmo mi vocación de seguidor de Fray Antón de Montesinos y ser la voz que clama en el desierto y vuelvo a pedirle a los tomadores de decisión que tomen muy en serio el tema de la seguridad publica ya que con estadísticas falsas o funcionarios que sean como Tavín el personaje que describe aquella canción del conjunto Quisqueya, no se podrán desarrollar política pública certeras de prevención y reacción a la criminalidad y traten de escuchar a quienes deben escuchar sobre todo en el cerrito de la calle Dr. Delgado esquina México.