“Nuestros países son los menos responsables del daño ambiental a nivel mundial”

Los estados insulares como Tuvalu han reclamado durante más de 30 años acciones climáticas concretas a nivel global.
En 1990, naciones insulares del Pacífico formaron una alianza diplomática con otras del Caribe, como Antigua y Barbuda, y del océano Índico, como las Maldivas. El objetivo era crear un frente común en las negociaciones sobre cambio climático.
La Alianza de Pequeños Países Insulares, Aosis por sus siglas en inglés, tiene hoy 39 miembros y ha jugado un papel clave en visibilizar el grave impacto del calentamiento global en los países en desarrollo.
La insistencia de Aosis fue crucial, por ejemplo, para que se incluyera en el Acuerdo de París en 2015 una referencia a la importancia de hacer frente a los llamados “daños y pérdidas”, las compensaciones por perjuicios climáticos irreversibles a los que no es posible adaptarse.
En un mensaje a la COP26, el actual presidente de Aosis, el primer ministro de Antigua y Barbuda, Gaston Browne, recordó que “la contribución de los pequeños estados insulares en desarrollo a las emisiones globales de CO2 es menos del 1%”.
“Nuestros países son los menos responsables del daño ambiental a nivel mundial”, agregó Browne.
“Pero nosotros pagamos el precio más alto”.
Ese precio ha quedado cada vez más claro gracias a múltiples estudios científicos.
El texto es un estracto de un articulo publicado por el medio BBC Mundo, el cual se titula “Medio ambiente: el país que se está preparando para su posible desaparición”, y por la importancia que tiene, dicidimos tomarlo esperando sensibilizar a los hacedores de politicas públicas, a fin contribuir con la desacelación del cambio climatico