Por Redacción
CRDmedia

La semana pasada el ministro de Agricultura, Limber Cruz, aseguró que, aunque la peste o fiebre porcina africana (PPA) no ha sido eliminada completamente, el gobierno tiene un plan para su erradicación total. A tres años y siete meses de haberse detectado dicha enfermedad, el gobierno sigue diciendo que tiene un plan, pero no lo muestra. Si le damos una mirada mucho más crítica a los eventos y acciones que se han venido sucediendo en dicho tema, podemos llegar a resultados más complejos que revelen falta de iniciativa y liderazgo, lo cual es preocupante para todo el sector y del pueblo dominicano.
Al asumir su cargo, el ministro Cruz afirmó haber encontrado un país desarmado en cuanto a técnicas, laboratorios y sistemas de bioseguridad en la industria porcina. Sin embargo, si echamos un vistazo en el tiempo a los datos arrojados por la FAO en la región, la República Dominicana enfrentó un brote de fiebre porcina africana (PPA) en el año 1980, la cual fue erradicada en ese momento; pero lamentablemente, la PPA reapareció en julio de 2021, después de más de 40 años de ausencia, señor ministro. ¿Por qué dicha enfermedad había tardado 40 años para reaparecer? ¿Acaso el desastre dejado en el sector contribuía a evitar que los cerdos de nuestras granjas no se infectaran? ¿O es que la realidad es otra señor ministro?
Para responder a los anteriores cuestionameintos, debemos mirar un poco el pasado, a fin de buscar algún tipo de luz que nos oriente y nos permita ver, si es cierto lo expresado por usted.
Cabe destacar que, fuimos de los primeros medios digitales en dar a conocer esta enfermedad, cuando denunciamos la muerte de decenas de cerdos de forma extraña y repentina en la franja fronteriza, el 24 de julio de 2021, mucho antes que las autoridades dieran alerta en fecha 28 de julio de ese mismo año. Los lugares donde se detectó la misma fueron en Montecristi y Dajabón, debido al descuido significativo por parte de las autoridades sanitarias, de acuerdo a la versión dada por los productores de cerdos del lugar.
Nuestra investigación en la frontera consistió al consultar a médicos veterinarios y productores de ganado porcino, la cual reveló que la enfermedad de Teschen, endémica en Haití en ese momento, podría estar detrás de estas muertes, lo que nos lleva a la conclusión de que la misma pudiera haber sido trasladada desde Haití por la falta de controles sanitarios en dicha frontera. Aunque en el momento en cuestión los análisis habían “descartado” otras enfermedades como la Influenza de tipo A y la Peste Porcina Clásica, los profesionales de la zona infirieron que podría tratarse de una combinación de peste porcina y Teschen, lo que subrayó la necesidad de confirmar los resultados en laboratorios más avanzados.
¿Qué pasó? ¿Por qué nuestros técnicos no pudieron detectarla a tiempo, a fin de tomar las medidas pertinentes? ¿Por qué nuestros técnicos no podían concluir en que se trataba de la PPA? Simple, porque se nos informó que los técnicos de la Dirección General de Ganadería (DIGEGA) habían sido DESVINCULADOS, los cuales eran expertos en el manejo de estas enfermedades. Estos técnicos eran clave para mantener el cordón sanitario fronterizo, y su ausencia dejó una brecha en la defensa contra la entrada de enfermedades desde Haití.
Sabemos de la respuesta ineficiente y tardía de parte del Ministerio de Agricultura, que afirmó que se trataba de una neumonía grupal la causante de las muertes de los cerdos en Montecristi, según el director del departamento de Sanidad Animal, Rafael Núñez. La declaración de cuarentena y la aplicación de tratamientos adecuados se aplicaron después que los medios denunciaran la situación. Esta respuesta tardía resaltó la falta de un sistema preventivo eficiente integrado por un personal calificado y de experiencia.
El presidente de la Comisión Permanente de Agricultura de la Cámara de Diputados de 2021, Rafael Abel, había manifestado que se debía erradicar todos los cerdos del país para combatir la fiebre porcina africana, tal como se hizo en 1978. Al parecer, en la actualidad no se ha ejecutado ningún plan que conlleve eliminar toda la población porcina del país. Así que, a casi cuatro años, la población dominicana y los productores de cerdos anhelan escuchar de usted las cosas positivas que está haciendo en bien del sector y de la población, y no las excusas por haber politizado un sector técnico, el cual nos habia librado de la PPA por un periodo de 40 años.
Pero claro, mientras tanto, tal vez deberíamos considerar otorgarle al ministro Limber Cruz un premio por su sobresaliente desempeño en la creación de planes invisibles y en la orquestación de la oratoria sin resultados visibles. Al menos así, tendríamos algo concreto que mostrar, ¡aunque solo sea un trofeo imaginario!