Naciones Unidas (EFE).- El comisionado de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), Philippe Lazzarini, negó este sábado cualquier conocimiento de un túnel bajo su sede en Gaza y dijo que la organización inspeccionó las instalaciones un mes antes de los ataques de Hamás.
El Ejército israelí hizo hoy nuevas acusaciones, mediante un comunicado y un video, de que los combatientes del grupo islamista palestino Hamás emplearon oficinas de la sede de la UNRWA en el norte de Gaza para sus operaciones y mostró armamento supuestamente hallado en su interior.
También indicó que un túnel de 700 metros de largo y a 18 metros de profundidad que pasaba por debajo de la sede de la UNRWA tenía su infraestructura eléctrica conectada a las instalaciones de la agencia.
Lazzarini dijo a través de un mensaje en la red social X que la agencia de la ONU “no sabía qué hay bajo su sede en Gaza”, que ha tenido conocimiento del túnel por las noticias en los medios y que no ha recibido ninguna comunicación oficial sobre el mismo por parte de las autoridades de Israel.
Agrega que no puede “confirmar o comentar” sobre esa información porque el personal de UNRWA dejó la sede en Gaza el 12 de octubre, cuando se intensificaron los bombardeos, y no ha usado las instalaciones ni es consciente de ninguna actividad allí desde entonces, excepto del despliegue de tropas israelíes, por referencias de los medios.
UNRWA había revisado su sede
Lazzarini señala que mientras no había un “conflicto activo”, la UNRWA inspeccionaba sus instalaciones por dentro cada trimestre y que la última inspección de sus instalaciones en Gaza “se completó en septiembre de 2023”, un mes antes de los ataques que han propiciado el conflicto en curso.
En todo caso, resalta que la agencia es una organización humanitaria que “no tiene competencia militar o de seguridad ni capacidad para hacer inspecciones militares de lo que hay, o podría haber, bajo sus instalaciones”, pero ha tenido mecanismos para alertar de sospechas y lo ha hecho.
“En el pasado, cuando se hallaban cavidades sospechosas cerca o debajo de las instalaciones de UNRWA, se enviaban cartas de protesta rápidamente a las partes del conflicto, incluyendo las autoridades de facto en Gaza (Hamás) y las autoridades israelíes”, un asunto que se reportaba y se publicaba “consistentemente” en los informes anuales en la Asamblea General.
Lazzarini destacó, por último, que las últimas informaciones merecen una investigación independiente pero criticó que “no es posible hacerla actualmente dado que Gaza es una zona de guerra activa”.
Israel insiste en su información
En el video que acompaña el comunicado castrense del Ejército israelí, el comandante del Equipo de Combate de la Brigada 401, el coronel Benny Aharon, afirma que Hamás ha usado la “oportunidad que le ofrecía la UNRWA” a diario y durante la guerra para atacar a los militares y civiles israelíes.
Israel ya acusó a varios miembros de la UNRWA de participar en los ataques de Hamás del 7 de octubre, lo que llevó a la ONU a ordenar una investigación y motivó que 18 países -entre ellos EE.UU., Japón, Alemania y Francia- anunciaran la suspensión de sus aportes a la agencia, que ha asegurado que se quedará sin fondos antes de que termine el mes.
Según la nota militar de este sábado, “se encontraron grandes cantidades de armas dentro de las habitaciones del edificio, incluyendo rifles, municiones, granadas y explosivos. Los servicios de inteligencia y los documentos descubiertos en las oficinas de los funcionarios de UNRWA confirmaron que, de hecho, las oficinas también las utilizaron terroristas de Hamás”.