Pekín (EFE).- El Kremlin estudiará tomar medidas “sopesadas, coordinadas y eficaces” para contener a la OTAN tras las decisiones en la cumbre de Washington que “amenazan la seguridad” de Rusia, mientras China pidió al organismo atlántico “abandonar la mentalidad de guerra fría”.
“Todo esto requerirá de nuestra parte unas medidas de respuesta sopesadas, coordinadas y eficaces para contrarrestar a la OTAN”, dijo el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, al comentar los resultados de la cumbre de la Alianza.
Según Peskov, en Washington la OTAN “confirmó una vez más y de forma clara su esencia: es una alianza creada en una era de confrontación con el propósito de mantener la confrontación”.
Además, Rusia prometió una “respuesta militar” al anuncio de EEUU sobre el despliegue a partir de 2026 de misiles de largo alcance en Alemania.
Críticas a las declaraciones de Stoltenberg
China aseguró además que las recientes declaraciones del secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, que criticó a Pekín por “apuntalar la economía de guerra rusa” contra Ucrania, están “llenas de prejuicios” y de “ideas propias de la Guerra Fría”.
El portavoz de la Cancillería china Lin Jian declaró hoy en una rueda de prensa que la “retórica agresiva” de cumbre de la OTAN “no refleja la realidad de la política exterior china”.
Lin aseveró que China “no ha contribuido al conflicto en Ucrania y ha mantenido una posición objetiva y justa”, buscando “activamente soluciones pacíficas y políticas, una postura que ha sido reconocida y apoyada por la comunidad internacional”.
La OTAN que “pinta a China como una amenaza”
“La OTAN, al celebrar su 75º aniversario, ha intentado proyectarse como una organización dedicada a la paz, pero sus acciones pasadas en los Balcanes, Afganistán y Libia cuentan una historia diferente, una de intervención y desestabilización”, agregó el vocero, al tiempo que cuestionaba la narrativa de la OTAN que “pinta a China como una amenaza”, argumentando que la alianza militar occidental “ha creado una ansiedad de seguridad que a menudo es el resultado de sus propias acciones”.
Críticas a la estrategia de la OTAN
Además, Lin criticó la estrategia de la OTAN de “establecer un enemigo imaginario para justificar su expansión y poder”, y sostuvo que la alianza debería “reconsiderar su enfoque hacia China, que ha sido erróneamente etiquetada como un desafío sistémico”.
Lin aseguró que China ya ha presentado protestas oficiales a la OTAN por las declaraciones, a las que se “opone firmemente”.
El portavoz desmintió las acusaciones “infundadas” de la OTAN y subrayó que China “ha mantenido una postura constructiva” con respecto a la guerra en Ucrania, en “contraste con la difusión de información falsa por parte de la OTAN”.
El portavoz concluyó instando a la OTAN a reflexionar sobre las “raíces” de la crisis actual y a escuchar las “voces justas de la comunidad internacional”, al tiempo que pedía a la alianza que no extienda su influencia a la región Asia-Pacífico.
La posición ambigua de China
Stoltenberg expresó de parte de los líderes de la alianza, reunidos en Washington, que “China no puede facilitar el mayor conflicto en Europa en la historia reciente sin que eso afecte negativamente sus intereses y su reputación”.
Desde el comienzo del conflicto, China ha asumido una posición ambigua con respecto a la guerra en Ucrania, desde la cual ha pedido respeto para la integridad territorial de todos los países, incluido Ucrania, y respeto para las “legítimas preocupaciones de seguridad” de todas las partes, en referencia a Rusia.
La postura de China refleja las crecientes tensiones entre el país asiático y la OTAN, que han aumentado en los últimos años debido a factores como la expansión militar china, su creciente influencia económica y su relación con Rusia.
El pasado mes de mayo, durante su parada en Serbia con motivo de su gira por Europa, el presidente chino, Xi Jinping, prometió “no olvidar nunca” el bombardeo de la embajada china en Belgrado a manos de la OTAN en 1999.
China pide a la OTAN que “abandone la mentalidad de guerra fría”
En el mismo sentido se ha pronunciado la Embajada de China en la Unión Europea.
Ha pedido a la OTAN que “abandone la mentalidad de guerra fría”, después de que el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, criticase a Pekín por “apuntalar la economía de guerra rusa” contra Ucrania y “facilitar el mayor conflicto reciente en Europa”.
El portavoz de la misión diplomática en Bruselas aseguró en un comunicado publicado en la página web de la Embajada que China “no es responsable de la crisis en Ucrania y ha reiterado su compromiso con la promoción del diálogo y la búsqueda de una solución política, una postura que ha recibido el respaldo de la comunidad internacional”.