LAS FICHAS ESTÁN COLOCADAS EN LA MESA


Por Dr. Juan Miguel Castillo Pantaleón
CRDmedia

Sobre la “INSPECCION” DISFRAZADA: LOS PROCÓNSULES IMPERIALES, PREPARANDO EN R.D. LA INMINENTE APLICACIÓN DEL “PLAN DE CONTINGENCIA PARA EL MANEJO DE LOS FLUJOS MASIVOS MIGRATORIOS”.

Realmente, ¿a qué vinieron esta semana los funcionarios de la ONU, la OIM, el PNUD y el ACNUR a la frontera del lado dominicano?

Si en el Consejo de Seguridad de la ONU, el problema sobre la mesa es supuestamente “estabilizar” Haití en la víspera del envío de un contingente militar para controlar y eliminar las bandas y pandillas haitianas, ¿A QUÉ VIENEN DEL LADO DOMINICANO?

La CLAVE para entender esto nos la aporta este párrafo de la información que figura en la reseña del Diario Libre del jueves 3 de agosto, (enlace copiado al final de este escrito, para confirmar):

“El jefe de la misión destacó que, al lograr el objetivo, se logrará una migración controlada y segura. Instó a que el éxodo de ciudadanos haitianos hacia territorio dominicano cumpla con los estándares internacionales de protección de los derechos humanos y dignidad de las personas.”

¿Leyeron bien?

El jefe de la misión dijo que buscan “que el éxodo de ciudadanos haitianos hacia territorio dominicano cumpla con los estándares internacionales de protección de los derechos humanos y dignidad de las personas.”

¿Saben qué significa eso?

La palabra “ÉXODO” no es casual. Tiene un solo significado:

“Emigración de un pueblo o de una muchedumbre de personas”.

Pero si alguien quiere jugar a la hipocresía o a la ingenuidad, agreguemos que la actual situación de caos y violencia extrema, SIMILAR A UNA GUERRA CIVIL de baja intensidad en Haití, ha sido INDUCIDA por las mismas potencias que NO HAN CESADO EL ENVÍO DE ARMAS a esas pandillas que dicen querer combatir con una intervención de fuerzas militares.

Mientras y al mismo tiempo, a finales del mes de julio pasado, la ONU cerró el Programa Mundial de Alimentos que es lo único que había evitado que murieran de desnutrición miles de niños, mujeres y ancianos haitianos. Un éxodo por hambruna será la previsible consecuencia.

No perdamos de vista que esas fuerzas militares “humanitarias”, a nombre de la ONU, vienen a operar en lo que, al final de cuentas, es un minúsculo territorio insular, la isla de Santo Domingo.

No olvidemos que durante la ocupación anterior en Haití, las tropas de la ONU provocaron una epidemia de cólera, violaron y embarazaron incontables niñas haitianos cuyos hijos fueron abandonados luego a su suerte; Esa tropa mantuvo el control militar sobre Haití, sosteniendo gobiernos títeres que fueron impuestos desconociendo los resultados de las elecciones, para que esas mismas potencias pudieran hacer rapiña con más de 12 billones de dólares recaudados por la caridad internacional para la reconstrucción de Haití luego del terremoto del año 2010. De esa rapiña ya no queda nada. Si algo hay en esta isla, está del lado dominicano

El Secretario de Estado Anthony Blinken dijo, esta misma semana, que E.U.A. va a contribuir de manera significativa con esa nueva misión militar en la isla, sin especificar qué significa eso.

Para quienes no han estado atentos, el martes pasado (1 de agosto) Matthew Miller, portavoz del Departamento de Estado, anunció que E.U.A., junto a Ecuador, presentará la propuesta al Consejo de Seguridad para que autorice el envío de las tropas a la isla. Pocos medios han señalado que esa misma semana la presidencia rotativa del Consejo recaerá en manos de ellos mismos (E.U.A.).

El país que se ha ofrecido a encabezar la tropa (Kenia), es un país africano con sus propios problemas. Su re-electo presidente, desde agosto del 2022 (William Ruto), es un sujeto con un largo historial, que incluye una acusación ante la Corte Penal Internacional por crímenes de lesa humanidad presuntamente cometidos durante la violencia post-electoral de 2007-08 en Kenia (caso ICC-01/09-01/11). El congraciamiento y apoyo del presidente Biden y el Secretario Blinken al keniano, está ampliamente documentado en Internet. Kenia es la punta de lanza que pretende hacer contrapeso norteamericano a las amplias influencias chinas en el continente africano.

Esa intervención militar en el lado haitiano, VATICINA UN MOVIMIENTO HUMANO DE IMPOSIBLE CUANTIFICACIÓN. Pues esa fuerza tiene la expresa encomienda de actuar con violencia contra las bandas y pandillas, COMPUESTA POR CIVILES CON LA MISMA APARIENCIA DEL RESTO DE LA POBLACIÓN. Todo esto en un contexto en el cual con la mayor complacencia, cuando no tolerancia, de las autoridades haitianas se patrocina en Haití la distribución de miles de machetes y armas blancas entre la población haitiana como mecanismo de “autodefensa” contra las pandillas (el llamado Movimiento “Bwa Kalé”).

La estampida de población que huirá de esa violencia militar, en el Derecho Internacional Humanitario SOLO TIENE UN NOMBRE, se denomina los REFUGIADOS. Eso tiene un Estatuto de Protección y la R.D. es signataria de esa convención (resolución 694, del 8 de noviembre de 1977, Gaceta Oficial No. 9454) y dos decretos para su manejo (Decreto No. 1569, del 15 de noviembre de 1983, Gaceta Oficial No. 9625, que crea e integra la Comisión Nacional para los Refugiados; y el reglamento No. 2330, del 10 de septiembre de 1984, Gaceta Oficial No. 9645, sobre la Comisión Nacional para los Refugiados.)

¿Qué implica esto?

El efecto más peligroso para RD de esa Convención es que obliga al Estado al “non refoulèment”, es decir, que al “refugiado” NO SE PUEDE REPATRIAR O DEPORTAR de regreso a su país.

El “PLAN DE CONTINGENCIA PARA EL MANEJO DE LOS FLUJOS MASIVOS MIGRATORIOS”, fue financiado por el Departamento de Estado de E.U.A. (“Programa Regional sobre Migración Mesoamérica – El Caribe financiado por la Oficina de Población, Refugio y Migración), a través del Instituto Nacional de Migración (INM). Fue adoptado en julio del 2019 con la participación activa del Ministerio de Interior y Policía y de la Dirección General de Migración. La realización de los talleres para su elaboración puede confirmarse en la pág. 61 del Informe de ejecución de Plan Operativo Anual del INM de ese año.

Para la ejecución del Plan y el manejo de sus consecuencias para R.D., otras iniciativas también financiadas con presupuestos millonarios por el gobierno norteamericano y la OIM, se ejecutaron durante los años 2020 y 2021; son el “Hispaniola People to People (P2P) Conflict Mitigation (CM) Program”, del USAID, y el “Curso para formación en base de principios humanitarios de respuesta a emergencias” de la OIM, para entrenar el personal que manejaría los Campos de Refugiados, incluso durante la epidemia del COVID-19.

El PLAN DE CONTINGENCIA dispone el manejo de, AL MENOS, 5 CAMPOS DE REFUGIADOS CON CAPACIDAD PARA 90 MIL HAITIANOS CADA UNO (uno en cada provincia fronteriza). El Plan establece su activación INMEDIATA desde que ocurra una cualquiera de las circunstancias que actualmente acontece en Haití.

El Plan establece hasta el diseño de su estructura, la identificación de los recursos que cubrirán su presupuesto y cómo el control y manejo de esos campos salen de las manos del Ministerio de Interior y Policía y el control de la identidad de los refugiados para ser manejado por organismos fuera del control del Estado dominicano. A seguidas de este escrito y para quien no conozca el Plan, lo envío.

Este Plan, que se mantuvo en el mayor secretismo, en diciembre del año 2020 fue denunciado y demandada su nulidad ante el Tribunal Superior Administrativo (TSA) por un grupo de abogados que encabecé, representando ciudadanos y diversas fundaciones.

A las audiencias, el Instituto Nacional de Migración, el Ministerio de Interior y Policía y la Dirección General de Migración enviaron todo un cuerpo de abogados. En estrados, esas instituciones, cuyos titulares son designados por el Presidente, alegaron no estar de acuerdo con el contenido del Plan y afirmaron que no lo reconocían, a pesar de estar documentado y no haber presentado una sola certificación que desmintiera su existencia. Incluso, mientras se estaba conociendo el proceso, el Presidente dijo de manera informal en una reunión que fue convocada al Palacio Nacional, que tampoco reconocía ese documento. Estuve ahí. Sin embargo, en forma paradójica y contradictoria todos los abogados que representaron al gobierno y el Procurador General Administrativo (que representa al Estado), se opusieron a la demanda que persigue que el Plan sea declarado nulo por su ostensible inconstitucionalidad e ilegalidad.

El caso concluyó y ha estado pendiente de fallo desde hace casi tres años. Extrañamente, el 1 de agosto de esta misma semana en la que todo esto acontece, la Presidencia del TSA dicta el auto núm. 03423, “apoderando” una sala para conocer UN CASO YA CONCLUIDO Y EN ESTADO DE FALLO HACE CASI 3 AÑOS, lo cual es algo absolutamente contrario al procedimiento y mueve a suspicacia y análisis.

Recordemos que en octubre del año 2022, con mucha alegría, el TSA se vanaglorió de que el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), le otorgó un premio a una de las Salas de ese Tribunal por una sentencia (#0030-1643-2022-SSEN-00513, del 22 de junio de 2022) en la cual desconoció los decretos de aplicación de la Convención y dijo que no existe plazo para el reconocimiento en R.D. para solicitar la condición de refugiado. Eso está en el internet en la propia página del Poder Judicial.

Simultáneamente, se va diluyendo la posibilidad de un cacareado “Pacto para la Defensa de la Soberanía” entre importantes sectores nacionales, convocados en comisiones desde febrero de este año, por las contradicciones, las propuestas desafortunadas por parte de instituciones del mismo gobierno y las tentativas de manipulación de borradores; situación que más bien parece parte de una distracción con objetivos de neutralización de actores nacionales, confirmando así, tal vez, lo que alegaron anticipadamente las principales fuerzas de oposición, que se negaron legitimar con su presencia el entretenimiento. (Salvedad: Esas mismas fuerzas políticas, ahora en la oposición, son quienes sentaron las bases de este problema, porque TODOS participaron en la inaplicación y violación de la ley de migración y, salvo una que otra declaración suelta, en ningún momento han fijado una posición firme sobre el tema frente a los poderes foráneos.

Todos los dominicanos, debemos estar muy atentos a los acontecimientos que están por ocurrir en los días por venir.